Ir de compras es algo que a las mujeres nos vuelve locas, aunque claro, también hay hombres que disfrutan de esta actividad, misma que muchos consideran ¨una forma de relajarse¨ aunque creo que cuando nos excedemos de más y gastamos sin medida, las consecuencias pueden traernos mucho más que estrés.
Con el fin de cuidar nuestra economía y ayudar a aquellos denominados ¨compradores compulsivos¨, Pavlov ha presentado un invento único pero también un poco retorcido.
Se trata nada más y nada menos que de una pulsera que cuidará tu bolsillo evitando que gastes más de la cuenta. Esta pulsera estaría vinculada a tu cuenta del banco, así que sabrá exactamente lo que has gastado y cuando debe aplicarte el castigo, ¿cuál es?, pues una descarga eléctrica de 225 voltios, ¿puedes creerlo?
La ventaja es que tú programas esta pulsera, tú impones el límite pero si no deseas ser castigado debes respetarlo y no pasarte de la cuenta.
En muchas ocasiones nos hacemos de un sinfín de cosas que no necesitamos, de hecho simplemente las acumulamos en nuestro hogar sin darle nunca el uso correspondiente, pero ahora con este dispositivo estamos seguros de que compraras únicamente lo más necesario.
Pavlov ha inventado este producto principalmente para ayudar a los compradores compulsivos mediante el conductismo y aunque el método de acondicionamiento psicológico suene bastante abrumador y arcaico, estamos seguros de que aquellas personas que no pueden parar de comprar, se la pensarán dos veces antes de excederse, al menos que no quieran recibir una descarga eléctrica.
Obligatoriamente quien adquiera esta pulsera asociará la descarga con su fanatismo a gastar de más.
Este invento ha recibido muchas críticas pues las personas comentan que existen otras formas menos ¨agresivas o brutas¨ para cultivarse en cuanto al control de la ansiedad y el autocontrol en sí.
De cualquier manera sea cual sea tu manera de resolver este problema de tirar el dinero por montones, recuerda que lo importante es que no te pase lo que al mapache con el algodón de azúcar. Aprende a administrarte y así disfrutarás más de tus ingresos, ¡suerte!
